Me duelen las mandíbulas
por el peso de tu océano.
De bailar un swing contigo sola
el estómago me pica.
La marea está bajando,
así que caminaremos hasta la isla que quiero
ver crecer el mar desde allí
Es la única manera
hablar olas y peces sin decir nada.
*
Odio tener que recordarte que
la ignorancia no exime del cumplimiento
así que agárrame por la cintura
aunque bailemos separados.
También los planetas lo hacen
y
a partir de esta ola
mi órbita será otra
voy a cambiar el sistema.